“La receta del bienestar corporativo”
En la actualidad los desafíos de salud del mundo han cambiado mucho en relativamente poco tiempo. En el 1900 las principales causas de muerte de los seres humanos eran las enfermedades infecciosas. Si revisamos los últimos informes de la OMS nos encontramos que el gran reto de salud al que nos enfrentamos en el siglo XXI son las Enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT). Entre ellas encontramos las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la diabetes, la obesidad, enfermedades respiratorias, etc.
En el año 2020 nos hemos visto inmersos en el curso de una pandemia con COVID-19, la cual si bien es un reto mundial en salud de origen infeccioso, su mayor mortalidad la encontramos en personas mayores de 65 años con enfermedades crónicas de base (tomando especial énfasis la obesidad).
Todas las ECNT tienen en común que se ven muy afectadas por el estilo de vida y los hábitos de salud de las personas. Cuando pensamos en la forma de aportar herramientas y soluciones respecto a estas enfermedades, lo hacemos desde 3 ejes: el sector sanitario, los entornos (empresas, asociaciones, fundaciones, gobiernos, etc) y como no, desde cada persona.
Nuestro enfoque en salud y bienestar corporativo tiene una visión integrativa, donde siendo parte del Sector Sanitario nos centramos en generar Entornos de cambio que favorezcan estilos de vida saludables dentro de las organizaciones. Dentro de nuestra forma de entender los cambios de hábito sabemos que la clave es la motivación intrínseca de las personas, lo que nos lleva al desarrollo de programas centrados en la Autogestión de la Salud.
Consideramos importante que los Programas de Salud y Bienestar Corporativos tengan un hilo conductor común dentro de las múltiples intervenciones (trabajo multidisciplinar) que desarrollamos, y que se encuentren alineados con la cultura y los valores de las organizaciones.
En los últimos estudios que han evaluado el impacto de los programas de salud y bienestar corporativos se ha llegado a la conclusión que, además de los beneficios que se obtienen a nivel de productividad, absentismo, compromiso del empleado, etc; estos programas generan un ROI que puede llegar a los 5,9 € por cada euro invertido (Red Europea de Promoción de la Salud en el Trabajo).
A medida que la línea entre el trabajo y la vida se desdibuja, proporcionar un conjunto sólido de programas de salud y bienestar se está convirtiendo en una responsabilidad corporativa y una estrategia para impulsar la productividad, la identidad corporativa y la retención del talento.
Cuando hablamos de Salud corporativa ¿A qué nos referimos exactamente?
Como punto de partida la Salud Corporativa comienza dentro de una organización e involucra a las diferentes áreas implicadas: RRHH, RSC, Servicio Médico, PRL, Dirección ejecutiva y como eje central a sus trabajadores.
Creo que el gran desafío cuando acompañamos a una empresa en intervenciones de Salud y Bienestar está en lograr generar una dirección común en todas las acciones realizadas, teniendo por objetivo principal generar un entorno de cambio para los trabajadores que los acerque hacia estilos de vida saludables.
La SALUD CORPORATIVA necesita llevar de la mano el concepto de SALUD POSITIVA, que se refiere a lo que crea salud en las personas, a lo que realmente aporta en nuestro bienestar como individuos.
La evidencia científica actual refuerza el poder de las intervenciones colectivas para lograr el cambio de hábitos de las personas en dirección saludable, y entendiendo que una gran parte de la población activa española trabaja dentro de empresas/organizaciones, éstas se convierten tras esta reflexión en actores clave como motor de cambio en la salud de nuestra sociedad.
¿Por dónde comienza una empresa a abordar la Salud Corporativa?
Afortunadamente las empresas hoy no parten de cero, y cada vez hay mayor consciencia de la importancia del abordaje de la salud y bienestar de los trabajadores desde otra perspectiva.
Destacaría la necesidad de mirar en el medio-largo plazo en este aspecto, porque es lo que realmente va a generar una transformación organizacional en materia de salud.
Un primer paso fundamental es sentarse a hablar entre las personas implicadas dentro de la organización y tener definidos los objetivos de salud y bienestar (acompañamos a las empresas en el proceso de establecimiento de objetivos en salud). Estos objetivos necesitarán de una gran convicción y compromiso para que puedan materializarse en el tiempo.
Una vez definidos los objetivos es el momento de comenzar al desarrollar un Programa de salud corporativa y su marco temporal de actuación.
Desde Corporate Health nuestra receta se basa en el compromiso, el trabajo en equipo y el desarrollo colaborativo a través de nuestros recursos humanos y tecnológicos.
En la actualidad vivimos en un mundo en constante cambio y nosotros trabajamos hacia un nuevo paradigma de valor en la salud corporativa.
Dr. Javier Amestoy
